Paul Chiang nació en Taichung en 1942. Actualmente vive y trabaja entre Taitung y Taipéi. Estudió en la Escuela Primaria Nissin (ahora conocida como la Escuela Primaria Rixin) en el Distrito de Jiancheng, Ciudad de Taipéi, donde se inspiró por un profesor de arte y comenzó a aprender pintura. Durante la escuela secundaria, Chiang comenzó a aprender pintura en profundidad con Lee Shih-chiao, primer artista de pintura occidental en Taiwán, y también entró en contacto con la pintura al óleo. Fue ese momento en que Chiang decidió embarcarse en el camino del arte. A Chiang le gustaron especialmente las obras de artistas como Paul Cézanne y Vincent van Gogh; y posteriormente se interesó aún más por la música de Gustav Mahler y las esculturas de Alberto Giacometti.
En 1960, Chiang fue admitido en el Departamento de Arte de la Universidad Nacional Normal de Taiwán, pero se vio obligado a tomarse un año libre debido a una tuberculosis. Comenzó a aprender a tocar el violonchelo y a escuchar con frecuencia la pieza para piano de Claude Debussy "Claro de luna". Con el paso del tiempo, la música clásica se convirtió en un alimento indispensable para su alma y su trabajo creativo, y tuvo una profunda influencia en él, ya que se inspiró en la música de Mahler, Bach, Debussy y otros.
Chiang comenzó a hacer creaciones con expresiones abstractas cuando era estudiante. En 1965, fue seleccionado para participar en la Bienal de São Paulo, Brasil, y realizó su primera exposición individual en Taiwán al año siguiente. Desafortunadamente muchas de sus obras se perdieron debido a inundaciones de un tifón. En 1968, cuando estudiaba en París, Francia se enfrentaba a una época agitada en la que la ola estudiantil parisina se extendía en su territorio, por lo que Chiang decidió trasladarse a Nueva York.
De 1975 a 1994 realizó dos exposiciones individuales en Nueva York, regresó también a París por un breve tiempo y desarrolló dos importantes series: "Notre Dame de Paris" y "Death in Distance". Desde 1995, ha viajado con frecuencia entre Nueva York y Taipéi y estableció el primer espacio creativo en Taiwán en la calle Jinzhou en la Ciudad de Taipéi. En 1997, realizó su primera exposición individual después de regresar a Taiwán. Hablando sobre sus obras, Chiang está más satisfecho con la serie "Notre Dame de Paris", seguida de la serie "Hundred Year Temple" que hizo después de regresar a Taiwán. Los colores que utilizó en las obras han sido diferentes durante su carrera artística.
En las pinturas de su primera etapa, Chiang usó principalmente tonos grises y negros, y enfatizaba las capas y la textura del pigmento. Tenía la costumbre de "cerrar las ventana para pintar". La ventana se sellaba con cortinas o cartón para aislar todos los sonidos y luces externas que pudieran causar distracción. Se encerraba en una habitación oscura para crear porque consideraba que la luz natural no es adecuada para pintar, porque para él su propio interior es la fuente de luz.
A lo largo de décadas de trabajo creativo, Chiang también trabajó en una empresa de publicidad y se dedicó a la decoración de interiores. Aunque tuvo que trabajar duro para ganarse la vida, siempre insistió en no vender sus obras. Chiang dijo una vez que si no se hubiera convertido en artista, le hubiera gustado ser arquitecto.
Después de regresar a Taiwán, Chiang finalizó sus series más representativas, como "Hundred Year Temple" y "Silver Lake". En el 2008, Chiang se mudó a Taitung. La luz brillante de la naturaleza y el mar inspiraron a Chiang a tener una imaginación de creación completamente diferente, lo que lo llevó a explorar y encontrar la forma más adecuada de corresponder con el color, y crear las colecciones coloridas como "Pisilian", "On the Wings of Song" y "Jinzun", entre otras. Su estilo de pintura ha pasado de composiciones sombrías, minimalistas, incluso monocromáticas, al uso del color y pinceladas para expresar la contemplación y observación de la naturaleza y la experiencia de la vida.
Además, las pinturas de Chiang rompen conscientemente el marco para buscar crear una extensión infinita, un ideal que ha evolucionado aún más hacia creaciones tridimensionales. En el 2007, realizó una exposición individual titulada "A Journey into Dimension and Space", en la que presentó sus primeras esculturas abstractas de acero. Además de su creación, Chiang también participó en una variedad de otras actividades, incluida la interacción y la enseñanza a jóvenes locales. Chiang cree que debe dejar atrás no sólo pinturas, sino también un legado espiritual para las generaciones futuras. Esto es lo que él considera su verdadero valor como artista.
En el 2020, el Museo de Bellas Artes de Taipéi invitó a Chiang a realizar una exposición retrospectiva de más de 200 piezas que abarcan desde la década de 1960 hasta el presente, incluidas obras inéditas en papel y pequeñas pinturas al óleo. Así, toda su espectacular historia de vida se presentó ante los ojos del mundo. En los últimos años, su último objetivo ha sido integrar el arte, la arquitectura y el paisajismo para crear un parque de arte para Taitung, un lugar donde artistas, compositores y literatos pueden venir a crear sus obras.